Esta mañana tecleando en mi pc pensé ver caer mis dedos congelados sobre la mesa.Puedo jurar ante cualquiera de ustedes que nunca he sentido tanto frío. Frio en los huesos, en la médula misma. Un frío atroz y omnipotente que llama al comentario obligado " hoy sí que se pasó el frío con mis familiares y con el gato de la casa ji-ji-ji-. He pasado inviernos en diferentes barrios de Santiago, pero como el frío que he sentido ahora, no recuerdo. Leia en el diario que se congelan y nevar semanas enteras en el sur, incluso recuerdo muchos años atrás una gran nevasón en Santiago que se derrumbo parte del techo de una pieza de mi casa, pero no sentí este frío de ahora estoy segura.Se dice que Santiago es la ciudad mas helada. Al fondo de mi cama, de mis sueños, de mis desesperanzados rezos para que suba la temperatura mañana. La culpa la tiene la mala calefacción, la mala ropa, la tradición de abrir ventanas a razón de nada ? Todo eso influye, aunque algo tiene que ver la cordillera helada como una frontera de hielo. La sensación de encierro,de no poder salir, de estar al final de todo, tan cerca del polo, aumenta el frío, lo convierte en castigo que no creemos merecer. Unos minutos atras escuché que esta ola polar se extenderá hasta el mes de setiembre. Dios nos proteja, a los ancianos con más clemencia te lo suplico Señor.rrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr.
Sé que el comentario que hice sobre el frio me quedó más o menos, es que estoy entumida de frio.
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